Las CARTAS A UN JOVEN POETA son un libro «distinto». Durante más de veinte años tuvieron un único lector.
Publicadas por él en 1929, tres años después de la muerte de Rilke, han sido leídas y releídas por centenares
de miles de lectores a lo largo del siglo. Su título debería ser, quizá, Cartas al aprendiz de hombre, porque tal
es su tema: ¿cómo llegar a ser lo que estamos llamados a ser?, ¿cómo entrar en contacto con la inmensa energía
que habita en lo inconsciente?, ¿cómo transformar la conciencia poética, creadora, capaz de captar la belleza
y la grandeza de lo real? Porque «poeta» y «hombre» para Rilke son dos palabras que quieren y tienden a ser
sinónimas.
Quizá el secreto de este fascinante libro sea, en realidad, su tono. Al leerlo, contagia aquella vibración dulce,
serena, íntima, acogedora, abierta al Todo sin ansiedad ni preocupación y hace sentir al lector su propia vibración
y realidad en medio de la fantasmagoría masiva y quimérica de la existencia así llamada normal.
El lector encontrará en estas cartas, escritas a lo hondo y único de cada ser humano, una presencia, una
compañía y una dulzura inolvidables. No se cansará de leerlas y releerlas, especialmente en ciertos momentos
de su vida. Porque en ellos, quizá cuando más lo necesite, estas cartas y su autor le recordarán, le harán sentir,
quién es, en realidad.
AUTOR
Rainer Maria Rilke (Praga,
4 de diciembre de 1875 -
Val-Mont, Suiza, 29 de
diciembre de 1926) fue un
poeta y novelista austríaco
considerado uno de los
poetas más importantes en
alemán y de la literatura
universal. Sus obras
fundamentales son las
Elegías de Duino y los Sonetos
a Orfeo. En prosa se
destacan las Cartas a un
joven poeta y Los cuadernos
de Malte Laurids Brigge. Es
autor también de varias
obras en francés
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