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La historia de la evolución demuestra que no podemos vivir bien sin la luz del sol.
Para la autora, los humanos hemos pervertido nuestra relación con la luz natural, implicada en la regulación de nuestro ritmo circadiano, entre otras cosas.
Esta obra defiende que alinear el reloj biológico a los ciclos de luz natural es fundamental para nuestro bienestar y felicidad.
«Un estudio deslumbrante y revelador, uno de esos escasos libros que mejorarán sustancialmente tu vida.» James McConnachie, Sunday Times
¿Qué es la moderna ciencia de la luz solar y cómo puede transformar nuestra vida? Recientemente, la ciencia ha demostrado algo que nuestros antepasados ya intuían: el sol determina nuestra biología, desde los ciclos de sueño hasta el sistema inmunológico. La falta de luz natural o un exceso de iluminación en horas nocturnas altera el reloj interno, aumentando así el riesgo de desarrollar graves enfermedades, incluidas dolencias cardiovasculares, diabetes 2, obesidad, demencia o cáncer.
La prestigiosa periodista Linda Geddes combina las investigaciones más punteras con interesantes experimentos propios para convertir la ciencia de la luz solar en un relato brillante, que abarca desde su propia experiencia en Las Vegas, donde recurren a la luz artificial para estimular el juego compulsivo, hasta su visita a una comunidad Amish, que prescinde por completo de la iluminación eléctrica.
Todo lo que necesitamos saber para restaurar el ritmo circadiano (los cambios físicos y mentales que experimentamos a lo largo de un día), recuperar la salud y disfrutar de los benéficos rayos solares de manera segura.
_AUTOR
GEDDES, LINDA Linda Geddes es periodista especializada en biología, medicina y tecnología. Se graduó con honores en Biología Celular en la Universidad de Liverpool y ocupó durante nueve años el cargo de editora en la prestigiosa publicación científica New Scientist. Ha recibido importantes premios, incluido el de la Asociación de Escritores Científicos de Gran Bretaña. La edición original de Bajo el sol ha sido avalada por Wellcome Trust, la fundación de investigación científica más importante de Gran Bretaña, a raíz de los hallazgos sobre los mecanismos moleculares de los ritmos circadianos que valieron el Nobel a sus descubridores en 2017.
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